Que las barbas se llevan es un hecho, nadie lo duda ya, lo que no todo el mundo tiene tan claro es como se llevan. Atrás han quedado las barbas de tres días tipo George Michael, actualmente, y sobretodo si queremos aconsejar a nuestros clientes, hemos de saber que se llevan largas, de al menos tres semanas en adelante, hasta llegar al extremo del sueco Christian Göran (el modelo del anuncio de trivago) de hecho sólo que echemos un vistazo a una revista de tendencias masculinas tipo Squire, o GQ veremos en sus páginas multitud de ejemplos de tipos barbudos, de diferentes estilos, pero eso si, todos ellos actuales y todos ellos con barbas de cierta longitud.
Muy bien, ya sabemos que se lleva la barba y como se lleva, ahora debemos de saber como se arreglan y que cuidados requieren.
Cortaremos una barba dejando siempre la zona del cuello más corta que el resto para evitar el indeseable efecto papada, del cuello hasta el hueso de la mandíbula haremos un degradado de menor a mayor medida y en la zona que va de la mandíbula hasta la mejilla es donde dejaremos la medida que dará la forma definitiva a la barba. Por regla general marcaremos la línea del cuello bastante baja, y la afeitaremos con la navaja así como la mejilla, en la que tan solo afeitaremos lo mínimo imprescindible, o nada en absoluto, buscando un acabado muy natural.
Hay que tener en cuenta que la barba debe de quedar integrada y guardar una armonía con el cabello, y por tanto no deberá tener más volumen que éste.
Pero como toda tendencia tiene su contratendencia, también nos encontraremos con clientes que buscando una imagen más agresiva o transgresora, buscarán darle mucho más protagonismo a la barba llevando el cabello con medidas extremadamente cortas, consiguiendo un efecto talibán.
Igual que aconsejaremos a nuestro cliente aquello que mejor le sienta, hay dos estilos que los desaconsejaremos siempre, el primero será la perilla, por estar más pasada de moda que el chotis, aunque siempre hay un porcentaje de gente que aún se ha enterado. Y en segundo lugar, esas barbas finitas que parecen un desfile de hormigas, es un estilo que no le queda bien a nadie, a menos que te llame Joaquín Cortés y te dediques a bailar flamenco.
La frecuencia de corte depende sobretodo de la medida que de la barba, cuanto más larga es la barba más tiempo puede pasar en corte y corte, pero sin llegar a sobrepasar las tres o cuatro semanas.
Los cuidados que requiere una barba son muy sencillos, aconsejaremos al cliente que la lave con un champú para cabello seco y a continuación que se aplique un acondicionador, que puede dejar en exposición todo el tiempo que esté en la ducha, si la barba ya tiene cierta longitud deberá de pasar un peine con el acondicionador puesto, y peinarla otra vez al salir de la ducha.
Jordi Pérez
La Barberia de Gràcia
www.labarberia.net